Roberto Aguirre y sus máscaras carnavalescas
En Cajamarca nos encontramos en fiesta carnavalesca. Nos divertimos, bailamos, bebemos, gozamos y disfrutamos de esta fiesta tradicional.
Son innegables los cambios que ha traído consigo la tradición carnavalesca cajamarquina en los últimos años; es evidente que muchos de ellos desprestigian nuestra fiesta. Para comentar sólo algunos, la gente ya no juega con talco, hay extralimitaciones en las guerras de globos, las guitarras y tambores han quedado en el olvido en los contrapuntos y coplas carnavalescas, pues ahora el principal instrumento es la tarola; el tradicional corso se desarrolla en total desorden y hay improvisación por parte de algunos participantes.
A esto hay que agregar el deceso de uno de los artistas más representativos de la fiesta carnavalesca, el Sr. Roberto Aguirre, un artista cajamarquino de antaño, especialista en la confección de máscaras de malla de alambre y otras variedades.
Tuve la oportunidad de charlar con este ilustre artesano, todo un personaje cajamarquino, quien me comentaba acerca de su decisión de culminar sus labores en este año, pues ya la edad pesa después de décadas de trabajo continuo a favor de la conservación y valoración de las tradiciones cajamarquinas relativas al carnaval.
Lastimosamente, los talleres que este señor trató de implementar y enseñar a jóvenes y adultos, destinados a enseñarles la confección de máscaras de malla de alambre (principalmente) y otras variedades (arcilla, yeso, jebe, etc.), no han tenido acogida; más aún, a lo largo de los años, ha sido pobre la participación de la Municipalidad Provincial de Cajamarca a este respecto, ya que durante sucesivos gobiernos no han colaborado con él para la difusión y materialización de dichos talleres. Esta situación le ha causado una profunda decepción, puesto que después de él, no hay persona que continúe con este legado, situación que puede generar la desaparición de este pedazo importante en la tradición carnavalesca.
Es una pena pensar que años más tarde, no veremos a las patrullas portando máscaras con las facciones del personaje español, quizá sólo se utilicen en el futuro máscaras de jebe, muchas de ellas confeccionadas en otro lugar menos en Cajamarca. Quedarán en el recuerdo, en las fotografías y recortes periodísticos, las imágenes de estas singulares máscaras que durante tanto tiempo realzaron y dieron color a la fiesta del carnaval.